La tortuga era de piedra en su simetria celestial y sus palabras solo eran audibles dejando el tenor acido en diferentes sacramentos...
No habria dudas en torrentes sanguineos de luz indiga...
Cuando el diablo hizo la otra mitad del mundo yo dormia como lo hacen las risas cuando nadie las usa.
No habia espinas y aun asi habia rosas.
No habia enjambres y aun asi habia miel.
El castigo fue perfecto, la aurora descalza y el practico caldazo a la interperie de cada alma.
La hoja afilada por los mismos de siempre y los mismos de siempre afilados por la hoja..
Los conjuros son maternales en su concepcion...
Todos somos parte del mismo precioso crimen.
No habria dudas en torrentes sanguineos de luz indiga...
Cuando el diablo hizo la otra mitad del mundo yo dormia como lo hacen las risas cuando nadie las usa.
No habia espinas y aun asi habia rosas.
No habia enjambres y aun asi habia miel.
El castigo fue perfecto, la aurora descalza y el practico caldazo a la interperie de cada alma.
La hoja afilada por los mismos de siempre y los mismos de siempre afilados por la hoja..
Los conjuros son maternales en su concepcion...
Todos somos parte del mismo precioso crimen.
Todos miramos a una mujer que duerme con miedo a que se despierte.
